miércoles, 14 de octubre de 2009

LA MUERTE BLANCA, de María Elena Machelett Erize


La realidad de un mundo desintegrado y cotidiano…un infierno…indica todo en mi ensimismada alma donde sufro.
Siento mi voz que emana de las sordas entrañas…del caos…del abismo en el cual mi vida se fue mecanizando después de tu partida.
Adivino el enfriamiento corporal sostenido por la soledad…como instrumentos de navegación detectando en el aire frío…las zonas de peligro acercándose por el océano azul…el glaciar o…la muerte blanca.
El frío de la soledad habita mi mundo…me fue absorbiendo esa fría tristeza…todo lo que me rodea percibe la melancolía…devorándose hasta los objetos sin vida.
La soledad se manifiesta como en las personas desgastadas…nunca te marca el momento…no se anuncia…ni siquiera te indica lo que ocurre.
Ya no sos parte de mi vida…debo aceptarlo…o no…
No tengo el valor de quedarme sin tu amor…mientras la soledad se va cristalizando…no importa me repito con orgullo…tuve la experiencia del amor…pero siento frío.
Realizo todo lo posible por seguir…pero me tortura…es la soledad que me angustia.
Los sucesos visibles ocurren con un simple adiós… pero los otros los que nadie distingue… atraen al monstruo aletargado encubierto en mi corazón…integrando parte de mí.
La claridad desmitificadora de mi pasado…el padecimiento me hostiga…no reconozco la imagen que me devuelve el espejo…grotesca.
La angustia es una herramienta de la ironía…me consume…cierro los ojos…el frío pasivamente con amarga compasión lo envuelve todo… acercándome lentamente a la muerte blanca… el glaciar….
Autora María Elena Machelett Erize
**grace**

1 comentario:

silvina soul dijo...

ohhhh!!que cambio, me gusta mucho, saluditos...Silvina