Dulce sueños

Entraste en mi corazón, sin pedir permiso,
con tu elagante trato, y tu modo de hablar sencillo.
Con esa risa contagiosa y tu particular estilo,
Aceptaste ser mi amig@, y me permites soñar contigo.
No sé de que color son tus ojos, pero adivino que,
tienes un mirar puro y tranquilo.
Extiendo mis brazos al aire, con la esperanza
de poder abrazarte,
Cierro mis ojos e intento visualizarte.