sábado, 9 de abril de 2011


Cuando la vida no quiera tomar un café contigo.
Cuando estés a punto de perder la esperanza
recuerda que la hora más oscura está en la que precede
al amanecer.
No te estoy diciéndo que lo que te ocurre
no tiene importancia, pero te estoy pidiéndo
que consideres el problema desde otro ángulo
y que te preguntes qué puedes aprender de
esta situación.
Si te dejas vencer por los contratiempos
éstos cobrarán más fuerza y volverán
una y otra vez, hasta que aprendas
a cambiar tu actitud, no permitas que ellos
te hundan.
Y no olvides cada día de dar gracias por lo que tienes,
por lo que tuviste incluso si se trata de alguien que
ya no está fisicamente contigo, pero
que siempre vivirá en tu corazón.
No tengo la receta para la Felicidad absoluta
pero me gustaría que aprendieras a apartar
las nubes para ver el sol, y ...
a pintar la vida del color que tu quieras.

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