sábado, 28 de febrero de 2009

El amor a Dios

"El amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo que nos fue dado" Romanos 5:5
Cuántas veces cometemos la torpeza de permitir que los problemas con los demás, o sea, con nuestro prójimo, interfiera en nuestra relación con Dios. Mi relación con Dios siempre debe ser más importante que los problemas que he tenido con mis semejantes. Sabemos que necesitamos a Dios y sabemos muchas veces cómo encontrarlo, pero los malentendidos o desencuentros con ciertas personas nos afectan tanto, que desperdiciamos la oportunidad de gozar las bendiciones del Señor. ¿Por qué no invertimos las cosas y hacemos que la relación con Dios afecte nuestra relación con los demás? Usted podría argumentar: "No puedo hacerlo, no tengo fuerzas para sobreponerme, el problema ha sido demasiado grande El apóstol San Pablo dice que el amor de Dios ha sido derramado en nuestros corazones, entonces no lo hacemos en nuestras fuerzas sino en Su amor. Establezca una buena relación con Dios, deje que su vida espiritual tome fuerza y luego se sorprenderá de su propio cambio de actitud hacia los demás, lo cual a su vez traerá un cambio de los demás hacia usted. "El idioma que todo el mundo entiende es el amor".
**grace**

3 comentarios:

alba dijo...

que hermosas palabras y cuanta verdad.
que DIos te guie y te ilumine siempre junto a tu hermosa familia.
un gran beso y abrazo.

Lucía Elisa dijo...

mi reina, hermosa entrada. estar en contacto con Dios es lo más importante, sentirlo con nosotros, sentir su presencia en nuestros corazones y nuestros actos. Dios no castiga como dicen muchos, Dios nos ama y nos perdona cuando nos arrepentinos, y así nuevamente laluz vuelve a nuestras vidas.
un beso =)
Lucía

Lidín me dicen. dijo...

Hola Grace:
Muy bueno lo del árbol y también esta entrada, no hay nada más grande que Dios y si estamos bien con él, estaremos bien con todos.
Pasá por mi blog que te esperan sueños....
Cariños grandes.